Como madre, siempre estoy buscando opciones saludables para la merienda escolar de mis hijos. Quiero asegurarme de que estén recibiendo los nutrientes que necesitan para mantenerse concentrados y energizados durante el día escolar. Además, quiero que disfruten de sus meriendas y que no se sientan tentados a comprar alimentos poco saludables en la cafetería o en las máquinas expendedoras. En este artículo, compartiré algunas ideas para meriendas escolares saludables que he descubierto a lo largo de los años.
Frutas y vegetales frescos
Una de las opciones más obvias y saludables para la merienda escolar son las frutas y los vegetales frescos. Estos alimentos son ricos en vitaminas, minerales y fibra, y son una excelente manera de satisfacer el hambre entre comidas. Algunas de las frutas que suelen ser populares entre los niños son las manzanas, las naranjas, las uvas y las fresas. Para los vegetales, las zanahorias baby, los pepinos y los tomates cherry son opciones prácticas y deliciosas.
Para hacer que las frutas y los vegetales sean más atractivos para los niños, puedes cortarlos en formas divertidas o servirlos con un dip saludable, como el hummus o el yogur griego con un poco de miel. También puedes hacer brochetas de frutas o vegetales para darles un toque más divertido.
Frutos secos y semillas
Los frutos secos y las semillas son otra excelente opción para la merienda escolar. Son ricos en grasas saludables, proteínas y fibra, lo que los hace muy satisfactorios. Algunas opciones populares incluyen almendras, nueces, pistachos, semillas de calabaza y semillas de girasol. Sin embargo, es importante recordar que algunos niños pueden tener alergias a los frutos secos, por lo que es crucial verificar con la escuela las restricciones alimentarias antes de enviar frutos secos como merienda.
Para hacer que los frutos secos y las semillas sean más atractivos para los niños, puedes mezclar diferentes variedades para hacer una mezcla personalizada. También puedes agregar un toque de dulzura con un puñado de pasas o arándanos secos. Solo asegúrate de elegir opciones sin azúcares añadidos.
Snacks caseros
Una de las mejores maneras de asegurarte de que tus hijos estén comiendo meriendas saludables es prepararlas en casa. Los snacks caseros te permiten controlar los ingredientes y evitar los aditivos y conservantes que suelen encontrarse en los snacks envasados. Algunas ideas de snacks caseros incluyen barras de granola caseras, galletas de avena y plátano, palomitas de maíz caseras o chips de kale horneados.
Además, hacer snacks caseros puede ser una actividad divertida para hacer con tus hijos. Pueden ayudarte a mezclar los ingredientes, formar las barras de granola o cortar las galletas. Esto les da la oportunidad de aprender sobre la importancia de comer alimentos saludables y les da un sentido de logro al ver el resultado final.
Yogur y queso
El yogur y el queso son excelentes fuentes de proteínas y calcio, por lo que son opciones ideales para la merienda escolar. Puedes enviar yogur natural o griego con un poco de miel o frutas frescas, o incluso hacer paletas heladas de yogur congelado. El queso en lonchas o en palitos también es una opción práctica y deliciosa que a muchos niños les encanta.
Si tu hijo tiene acceso a una nevera en la escuela, puedes enviar yogur o queso en envases individuales. De lo contrario, puedes optar por opciones que no necesiten refrigeración, como los palitos de queso o el queso en cuñas.
En definitiva, hay muchas opciones saludables para la merienda escolar que puedes considerar para asegurarte de que tus hijos estén recibiendo los nutrientes que necesitan para mantenerse concentrados y energizados durante el día escolar. Desde frutas y vegetales frescos hasta snacks caseros y lácteos, hay muchas maneras de hacer que la merienda escolar sea saludable y deliciosa.
